Israel apoya el ultimátum de Trump a Hamas y no descarta volver a la guerra
Crisis en Oriente Medio
Netanyahu ordena concentrar tropas en torno a Gaza por la posible suspensión del canje de rehenes

Soldados israelíes patrullan en el campo de refugiados de al-Faraa, en Cisjordania, este lunes.
Beniamin Netanyahuy, primer ministro israelí, ha declarado en un vídeo grabado después de la reunión de su gabinete de seguridad que “si Hamás no libera a nuestros rehenes antes del sábado al mediodía, el alto el fuego terminará y las fuerzas israelíes reanudarán los combates intensivos en Gaza hasta que Hamás sea completamente derrotado”.
Previamente, un alto funcionario israelí anunció que Netanyahu ha ordenado al ejército que refuerce sus tropas en la Franja de Gaza y sus alrededores. También se ha ordenado a los funcionarios “prepararse para cualquier escenario si Hamas no libera a nuestros rehenes este sábado”.
Según algunas fuentes, el gabinete de seguridad israelí habría hecho suya la idea, lanzada por Donald Trump, de que Hamas libere el sábado “todos” los rehenes, según informó una fuente a Efe. Sin embargo, en su alocución, Netanyahu no aclara si comparte esa idea. Según el diario Haaretz, quedan 76 rehenes en Gaza, de los que 35 estarían muertos.
El gabinete de seguridad de Israel se reunió durante toda la mañana para definir su estrategia en Gaza después de que Hamas anunciara ayer que suspende “hasta nuevo aviso” la próxima liberación de rehenes –programada para el sábado–, alegando violaciones israelíes del acuerdo de cese al fuego.
En concreto, el grupo islamista apunta entre estas brechas a “la demora en el retorno de los desplazados del norte” del enclave palestino, a los ataques “con disparos o artillería en varias zonas de la Franja” (que han causado más de una veintena de muertos desde el inicio de la tregua) y al “no permitir la entrada de ayuda humanitaria en todas sus formas”.
En días previos, Hamas había denunciado que Israel está reteniendo el acceso de elementos necesarios para habilitar refugios, como tiendas de campaña y caravanas, o que muchos camiones no contaban con productos de primera necesidad. Del mismo modo, Israel, que ha puesto “en máxima alerta” a su Ejército ante la posibilidad del colapso de la tregua, ha acusado varias veces a la milicia palestina de incumplir sus obligaciones, principalmente por retrasos en la entrega de las listas de los secuestrados antes de las liberaciones o por las condiciones físicas en las que los rehenes han sido entregados.
La segunda fase de la tregua, en el aire
A todo esto se suma que las negociaciones para avanzar a la segunda fase del acuerdo, que tendrían que haber empezado el 3 de febrero, siguen sin despegar.
Israel ha evitado fijar una posición y el pasado fin de semana solo envió una delegación a Catar, sin ningún mandato para progresar en los diálogos. En paralelo, fuentes israelíes han informado a medios locales que hay indicios de que el primer ministro Beniamin Netanyahu no tiene la intención de continuar con las fases 2 y 3 de la tregua, algo con lo que había amenazado desde la propia firma del pacto.
Milicianos de Hamas, en Deir el-Balah, Gaza, el pasado sábado.
Más allá del dramático anuncio de ayer, Hamas matizó poco después que pronunció su ultimátum cinco días antes del sexto intercambio de prisioneros para dar tiempo a los mediadores de encontrar una solución y permitir el cumplimiento del cronograma establecido.
No obstante, el presidente estadounidense Donald Trump, agregó anoche más leña al fuego al lanzar un contra-ultimátum, amenazando con “desatar el infierno” si Hamas no libera “a todos los rehenes” para el sábado al mediodía. Una advertencia que añade más inquietud a los otros mediadores, Egipto y Catar, quienes, según informa la agencia Reuters, han paralizado las negociaciones hasta que Estados Unidos dé señales claras de que sigue comprometido con el cumplimiento de todas las fases del acuerdo de tregua.